Cada 21 de septiembre se conmemora a nivel internacional el Día del Alzheimer, la causa más frecuente de demencia, que se traduce en la pérdida de capacidades cognitivas adquiridas, que impiden las actividades básicas de la vida diaria.
En términos clínicos esta patología neurodegenerativa produce pérdida progresiva de neuronas, en especial del hipocampo, región cerebral clave en el aprendizaje y la memoria.
Se estima que en Chile actualmente el uno por ciento de la población presenta algún tipo de demencia y el factor de riesgo más importante es la edad.
El Estudio Nacional de la Dependencia realizado por el Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama) en el año 2009, da cuenta que el 7,1 por ciento de las personas de 60 años y más padece deterioro cognitivo, cifra que aumenta exponencialmente a partir de los 75 años, alcanzando 36 por ciento en los mayores de 85 años, por lo cual se prevé un incremento importante de pacientes con demencia en el futuro, considerando el envejecimiento de nuestra población.
El neurólogo del Hospital Claudio Vicuña de San Antonio, doctor Carlos Cisternas Sepúlveda, indicó que la demencia tipo Alzheimer se caracteriza por un lento y progresivo compromiso de la memoria episódica – aquella que nos permite aprender cosas nuevas y almacenar recuerdos -, desorientación y, posteriormente, alteraciones conductuales.
“En etapas tardías se llega a la postración. En términos generales, la sobrevida promedio es de alrededor de 10 años desde el inicio de los síntomas, aunque es muy variable de un paciente a otro. Todo esto genera un compromiso importante no sólo del enfermo, sino que en todo el entorno familiar, con estrés y sobrecarga sobre todo del cuidador principal”, manifestó el especialista.
Detección y tratamiento
Desde 2019, el diagnóstico y tratamiento sintomático de la enfermedad de Alzheimer y otras demencias está incluido dentro de las garantías del AUGE o GES.
En los consultorios de atención primaria se realiza pesquisa periódica con test cognitivos incluidos en el Examen de Medicina Preventiva del Adulto Mayor (EMPAM), para así derivar oportunamente a especialista en caso de ser necesario.
“Frente a episodios de desorientación y olvidos significativos que alteren la capacidad de funcionar normalmente es imprescindible consultar con un neurólogo. Pese a que no existe tratamiento curativo el especialista puede prescribir fármacos que permiten un mejor control conductual. Para la población general, la mejor forma de prevenir las demencias es llevar un estilo de vida saludable y mantenerse activo mentalmente”, finalizó el doctor Cisternas.
Denominación
La enfermedad lleva este nombre en honor al psiquiatra y neuropatólogo alemán Alois Alzheimer, quien en 1907 describió el primer caso en una mujer de 51 años.